Tal y como ocurre en tierra, el mar es un espacio común en el que debe primar el respeto para poder compartir la naturaleza y garantizar la cortesía y la buena convivencia con otros navegantes. Por esta razón es fundamental hacernos las siguientes preguntas: ¿cómo debemos comportarnos correctamente en el mar? o ¿qué normas no escritas debemos seguir para garantizar una buena convivencia con otros navegantes?
Estas reglas de cortesía se dividen en dos grupos: las que se aplican al comportamiento a bordo del barco y las que se deben seguir en el puerto. En ambos casos debemos guiarnos siempre por el sentido común, aunque estas recomendaciones te ayudarán a despejar algunas dudas.
Reglas de navegación
Ayudar a los demás es una de las principales reglas no escritas de la navegación. Si te encuentras a alguien en apuros, no dudes en echarle una mano, no sin antes comprobar la seguridad de tu tripulación.
Por otro lado, resulta fundamental respetar el derecho de paso, es decir, dejar espacio suficiente a los barcos de mayor tamaño y tener cuidado con el oleaje, ya que puede mover tu embarcación. Por ejemplo, es muy desagradable estar comiendo tranquilamente en tu barco y que la mesa se tambalee porque otro barco ha pasado demasiado cerca y más rápido de lo debido. Recuerda que ponerse en el lugar del otro es básico para la convivencia, tanto en tierra como en alta mar.
No olvides que debemos contribuir a la limpieza y el cuidado de nuestros mares, para que todo el mundo disfrute de una experiencia agradable. Utiliza bolsas de basura para los desperdicios y no tires nada por la borda. Entre todos/as debemos dar ejemplo y cuidar del planeta.
Reglas a bordo
La regla principal en cubierta es escuchar siempre al/la capitán/ana. Es importante hacerle caso en todo momento porque solo así podremos garantizar la seguridad y el bienestar de todos los pasajeros y pasajeras.
El espacio habitable en una embarcación suele ser bastante reducido, por lo que hay que intentar no molestar a los demás. Es preferible llevar las pertenencias en una bolsa de lona, pues las maletas rígidas abultan demasiado, así como mantener nuestro espacio limpio y ordenado para que la sensación de agobio sea menor.
Otra recomendación es dejar claro cuál va a ser la distribución de tareas y el racionamiento del agua con el resto de pasajeros y pasajeras antes de partir. Siempre hay mucho que hacer a bordo y, por ello, es fundamental repartir las tareas de manera justa teniendo en cuenta las habilidades y la experiencia de cada persona. Asimismo, es importante establecer reglas para el consumo del agua y reservar las duchas largas con agua caliente para casa.
Reglas en el puerto
Como hemos comentado anteriormente, resulta fundamental tener en cuenta a lo demás, tanto a la hora de navegar como cuando nuestra embarcación está amarrada en el puerto. Por esta razón es importante dejar espacio suficiente a otros barcos e intentar no producir mucho movimiento al pasar para no desequilibrar a otras embarcaciones.
Todo barco amarrado en puerto debe estar en perfecto estado, con la cubierta limpia y ordenada, las velas recogidas y las líneas enrolladas. El respeto, el cumplimiento de las normas del puerto y no perturbar el descanso de los demás son reglas esenciales para garantizar una buena convivencia en los puertos.
Y, en caso de duda, recuerda guiarte siempre por el sentido común. Estas recomendaciones te ayudarán a que tus días en el mar vayan viento en popa.